Vaca Muerta: cómo formar recursos humanos para escalar y consolidar su crecimiento
A comienzo de año el complejo disponía de cerca de 40 mil puestos de trabajo directos, entre operarios, supervisores e ingenieros. Actualmente el desarrollo se ha multiplicado generando nuevos desafíos.
Vaca Muerta se enfrenta a una limitación en materia de disponibilidad de recursos humanos capacitados en la industria de los hidrocarburos. El foco está puesto en operarios, supervisores, ingenieros, que serán imprescindibles para la puesta en marcha de los proyectos que intensificarán el trabajo en los próximos años. Estos cuellos de botella son materia de discusión desde hace años, debido a que también la infraestructura y la disponibilidad de equipos muchas veces no acompaña el ritmo de crecimiento de la producción.
Se estima que en 2026 el número de trabajadores llegará a los 90.000, siendo más de 50 mil nuevos trabajadores que se ocuparán de la demanda en distintas franjas de funciones. Ellos, deben ser formados de manera particular, tanto para operar en la boca del pozo como para participar en maniobras de perforación y fracturación. Principalmente se debe al incremento de la capacidad de evacuación. Sólo tomando como ejemplo el caso del petróleo, se elevará el número de 300 mil barriles a cerca de un millón en tan solo tres años.
Según Conrado Bonfiglio, gerente de la Seccional Sur del Instituto Argentino de Petróleo y Gas (IAPG),la escasa formación de trabajadores «es un problema anterior a Vaca Muerta y tiene que ver con una industria muy tecnificada, con avances tecnológicos muy rápidos y donde todo el mundo tiene necesidad de actualización». Aceleradamente el IAPG desarrolló una Escuela Técnica Virtual de alcance nacional para el dictado de la Tecnicatura en Petróleo y Gas, para la formación particular que se precisa, persiguiendo dar rápida respuesta a la demanda que se avecina.






